Todos los días venía al mundo para cumplir con sus deberes, pero no veía la hora de escaparse, por eso prefería perder la consciencia y si era posible la cordura. Pero un día encontró un lugar diferente, uno al que podía ir solo él y perderse sin temor a ser localizado por el más moderno de los dispositivos, un lugar mucho más grande que el universo, con más misterios que los que hay al interior de un hoyo negro y más confortable que cualquier lugar en el mundo. Con el tiempo se hizo el intronauta más experto navegando el espacio interior y dedicó su existencia a recorrerlo.
•Edición limitada de 50 copias
•Tintas pigmentadas sobre papel museo 100% algodón
•34 x 34 cm
$220.000 COP